Si necesitas elegir el calefactor ideal y el que mejor se adapta a tus necesidades y al entorno en el que se utilizará, debes tener a mano algunos datos básicos:
- las dimensiones de la habitación a calentar [V]
- La temperatura [ΔT] que desea que alcance el ambiente
- el tipo de aislamiento de la habitación [K]
- Buen aislamiento: aislamiento térmico k = 1
- Aislamiento medio: aislamiento térmico k = 2
- Mal aislamiento: aislamiento térmico k = 3
- Falta de aislamiento: aislamiento térmico k = 4
Por tanto, el requerimiento de calor necesario se puede calcular como: V x ΔT x K [kcal/h] Por ejemplo: V = ancho 4 m, largo 12 m, alto 3 m, volumen de la habitación = 144 m³
ΔT = temperatura exterior -4ºC, temperatura ambiente deseada +19ºC, temperatura = 23ºC
K = 4 habitaciones simples no aisladas
El resultado es, por tanto, 144 x 23 x 4 =
13.248 kcal/h y hay que compararlo con lo que dice la etiqueta de la estufa o de cualquier aparato calentador que parezca adecuado, ya que produce más calor del necesario.
Considere también que: 1
(kcal/h) Kilocalorías por hora =
0,001163 Kilovatios Así que cuando hayas encontrado las kilocalorías necesarias tendrás que transformarlas en los kW que necesitas.
Y siguiendo el ejemplo anterior tendríamos:
13.248 x 0,001163 = 15,407 Kw